miércoles, 19 de diciembre de 2012

Escribo por no pensar

Escribir por no pensar, pero terminar escribiendo sobre lo que no quiero pensar. Yo y la pescadilla que se muerde la cola.

19, un mes. Y no lo estoy celebrando. Cada día un poco más oficial, poco a poco va conociendo más de mi, voy dejando ver sentimientos y voy conociendo un poco más de él. Quizás un mes le ha dado tiempo a pensar, a valorar lo que siente y a tomar una decisión. En ello está ahora mismo, mientras yo escribo. Decisión que tomó mucho antes de ese 19, pero donde no estaba yo, donde dejó una puerta abierta, por la que se colaron las ilusiones de ella. Hoy será un día a señalar, no sé si para bien o para mal. Si cerrará definitivamente esa puerta o seré yo la que tenga que salir por ella. Quiero dejar de sentirme culpable.
Recuerdo su voz insistiendo en que confíe en mi, en que me valore, que no soy inferior a nadie. Que soy yo el presente. Pero imposible ignorar al pequeño diablillo que se asoma por detrás de mi oreja izquierda. Y con él viene el miedo, miedo a dejarme llevar y sentir sin que sientan, como otras veces.

Un día que pudo terminar con una sonrisa como tantas otras veces lo ha hecho tras pasar un rato contigo, por quién empecé este blog. Hoy ha sido un día de esos que hubiese enmarcado hace meses. Almuerzo contigo, y te tumbas a descansar sobre mis piernas, mientras te acaricio para que duermas. Pero ya no me tiemblan las manos al hacerlo, ni deseo ir más allá de tu cuello. Nadie entenderá nunca lo que tenemos, sólo tu y yo, sólo pizzigato y la gata de cola blanca. Y no quiero renunciar a esto, porque sabes que he aprendido mucho de ti, porque tu también has aprendido de mi.

Qué fácil hubiera sido todo si desde abril hubiese aceptado esa invitación a tomar algo. Si hubiera cogido el teléfono el día que me apeteció tomarme un café con él. En ese momento estabas tu por delante, y ahora que sé lo que realmente eres para mi espero que no sea tarde. No quiero perderle, no quiero perderte a ti, que me entendáis los dos. Por pedir pediría que os diérais la oportunidad de conoceros de verdad y la posibilidad de llevaros bien, porque sería mucho más fácil... 

No pido tanto, no quiero un final feliz...

 















...sólo quiero serlo


miércoles, 12 de diciembre de 2012

Sin encontrar un orden lógico


Más de una semana sin escribir, sin contar y sigo sin saber por dónde empezar. Es tan grande el lío que tengo en la cabeza y la velocidad a la que va el pensamiento que mis dedos no saben qué escribir. Escribo y borro, intercalo una idea, vuelvo al principio y me doy cuenta que el siguiente párrafo me contradigo.

Supongo que es el reflejo de mis sentimientos, de un momento a otro no sé que siento, por quién lo siento, si debería sentirlo. Pienso que no, que mejor me quedo como estaba, que esto sólo puede traer problemas y me descubro al par de horas esperando, casi dormida en el coche, a que regrese. Tan sólo para darle un abrazo. 
Intuyo su juego a dos bandas, y se lo explico a ella, intento abrirle los ojos mientras yo cada vez los cierro más. No sé. No sé nada. Sé que ella no me miente, aunque habla con ojos de ilusión, la ilusión de que vuelva eso que perdió. Pero quien debe zanjar el tema no lo hace, y eso es lo que hace que yo mantenga este revuelo de dudas. No se lo puedo pedir, no tengo ningún derecho a hacerlo. Soy la última en entrar en esta película, donde probablemente me haya tocado hacer el peor papel. Y si le pidiera que renunciara, él también me podría pedir que renunciara yo, porque al fin de cuentas tu eres su rival, al igual que ella es la mia. No puedo pedirle que deje de tratarla como la amiga que es, sabiendo que yo no puedo renunciar a tus abrazos.

martes, 4 de diciembre de 2012

Apuestas perdidas

¿Hemos hecho una apuesta? ¿Hemos apostado lo que yo creo que hemos apostado? ¿Para qué?

Ah, vale, si, lo entiendo... No es de hombre reconocer que te fastidia que estas últimas semanas no seas mi prioridad, que esté poniendo mis ojos más allá de ti y que me comporte como tú mismo lo haces. Es más masculino hacer esta apuesta. Y menos mal que aún no sabes con quién he pasado esas tardes. Tan iguales y tan diferentes. Si fuera más fácil, si no tuviera tantas dudas y opiniones de tanta gente ya me hubiese lanzado al vacío. 

Al fin y al cabo lo que ahora tenemos tu y yo es lo mejor que podemos tener. Somos confidentes, aunque no te dé nombres, y esperar algo más es hacerme daño, tanto si llega como si no. Sé que no soy una más, lo has reconocido cuando te he demostrado que no voy a esperar, pero ahora no sé si quiero seguir más allá. Aunque reconozco que tengo miedo de perder tu amistad si esto que va naciendo por otro lado llega a algún sitio más allá del parque. 

Por ahora ya sabes lo que hay y no sé si eso es lo que ha provocado que estrechemos las manos en una apuesta que ya doy por perdida.

jueves, 29 de noviembre de 2012

Saliendo de Guatemala



No le entiendo... Si él es el segundo plato, ¿qué soy yo? El postre? Las migas que quedan en la mesa cuando todos han comido?  La cuenta atrás creo que la voy a empezar yo también. No merece la pena arriesgarme tanto

domingo, 25 de noviembre de 2012

Aquí me tienes


Aquí me tienes, besando tus heridas,
tan tuyas como mías porque a mi también me duelen.
Aquí me tienes, buscando esa mirada, esa palabra,
que aunque sólo sea un poquito pero algo te consuele.

Aquí me tienes, como un perro centinela,
siempre a la verita tuya, a tu lado y nunca enfrente.
Aquí me tienes, sonriendo cuando pienso en los idiotas
que quisieron separarnos y estaremos juntos siempre, siempre...

Así que sécate esas lágrimas y agárrate fuerte a mi brazo,
tu no te asustes de los vientos que yo te espanto a los diablos,
que tus dolores son los míos, que tu alegría es mi alegría,
que lloraré cuando tu llores y sonreiré cuando sonrías.

Aquí me tienes, buscando primaveras que coser en tu almohada,
que con flores siempre sueñen.
Aquí me tienes, el tiempo va pasando y va pasando,
y yo sigo aquí contigo siempre de ti pendiente, siempre, siempre...

Así que sécate las lágrimas y agárrate fuerte a mi brazo,
tu no te asustes de los vientos que yo te espanto a los diablos,
que tus dolores son los míos, que tu alegría es mi alegría,
que lloraré cuando tú llores y sonreiré cuando sonrías.

Ven y refúgiate conmigo en las paredes de este abrazo
y ya verás como este frío poco a poco va pasando.

jueves, 22 de noviembre de 2012

Triángulos de cuatro lados


No me arrepiento, y tras haber repetido, menos sentido tiene arrepentirse. Sin embargo, ese nudo en el estómago me hace pensar que lo he hecho mal. No tengo a nadie a quien dar explicaciones, pero he faltado a una de las reglas de la amistad. Me siento mal viendo que alguien aún alberga esperanzas y no poder hacer nada. Pero, ¿cómo le hago ver que debe olvidar? ¿Cómo lo hago sin explicarle lo que sé, sin explicar cómo me he enterado?
Sólo me queda esperar, seguir actuando como una espectadora más y a la vez intentar arroparla y abrirle los ojos intendando hacerle el menos daño posible.

A pesar de esa mancha de culpa me siento bien, despertando, nadando en un terreno que hacía tiempo tenía abandonado, volviendo a sentirme viva y capaz. Olvidando las inseguridades y alimentando mi subterránea autoestima.

Pero ahí sigue el eje principal, a pesar de lo que ha pasado estos últimos días. Pensé que me ayudaría a hacerme más fácil el camino de retirada, pero sigues estando muy presente. Sigo prefiriendo estar sentada frente tuyo, en silencio, tan sólo con el murmullo de la tele de fondo mientras te veo descansar. Sonrío cuando me preguntas quién es, cuando me interrogas y me aconsejas y te ofreces para defenderme de quien pretenda hacerme daño. Y en el fondo creo que deberías defenderme de ti mismo.

Me siguen afectando tus problemas. No puedo evitar preocuparme cuando te veo como hoy, cuando aprietas la mandíbula y tu sonrisa no aparece, cuando tu mente te controla de esa manera. No he pasado por nada igual, no puedo ponerme en tu lugar y me cuesta ayudarte. Pero te escucho, intento entenderte y te tiendo la mano. Y pienso que me gustaría ser yo parte del problema, que esto que he hecho sea una de esas cosas que se te han venido encima. Un minuto después lo dices y es la única broma que haces en toda la tarde. 

Parece que la reacción tuvo lugar en la persona equivocada -.-

 

jueves, 15 de noviembre de 2012

Una constelación


Una constelación es una agrupación convencional de estrellas, cuya posición en el cielo nocturno es aparentemente aproximada.

¿Se puede estar en medio de una constelación sin ser astronauta, sin separar los pies del suelo? Creo que sí, o por lo menos yo lo estuve... 

Cuatro estrellas a mi alrededor, 10 y 80 formando un ángulo con vectores en posiciones opuestas, 90 en la misma dirección que 80 al doble de distancia y 11 en ángulo recto y vector opuesto a 10. Altair, Deneb, Betelgeuse y Aldebarán. Cuatro amarillas que forman una constelación especial, pero no perfecta. 

Falta la más brillante, mi estrella polar, la que me ha dado calor esta tarde mientras una brisa fría me atravesaba y me sumergía en esta hipotermia emocional. Se ralentizan mis pensamientos y se me enturbia la vista. Si lo sabes y no haces nada podría entenderlo, pero ¿porqué buscar lo que no quieres encontrar?


lunes, 12 de noviembre de 2012

La voz de la conciencia


En algún momento te darás cuenta que has hecho demasiado por alguien, que el siguiente paso sólo puede ser pararse. Dejarlo solo y alejarte. No es que estés renunciando o que no lo hayas intentado con suficientes fuerzas. Es que debes entender que has sobrepasado la línea de la determinación hacia la desesperación. Lo que es verdaderamente tuyo, tarde o temprano lo será, y lo que no lo es, no importa lo mucho que te esfuerces, nunca lo será.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Puedo prometer y prometo


No puedo prometerte que sea para siempre, 
pero sí que sea perfecto mientras dure.

Tampoco puedo prometerte que todo sean momentos felices, 
sé que habrá miles de momentos difíciles que superaremos juntos.

Sé que no puedo prometer cumplir todos tus sueños, 
pero te prometo que lucharé para hacerlos realidad.

Te prometo los días más hermosos,
pero también las batallas más duras
y prometo abrazarte y estar junto a ti en todas ellas.

Prometo enseñarte cada día algo nuevo,
aunque no puedo prometerte todo el tiempo del mundo.

Prometo un te quiero nuevo cada noche,
ser la persona que más te quiera y
nunca olvidarte.

No puedo asegurarte un mañana, 
pero sí te aseguro un hoy.

No puedo prometerte estrellas,
pero sí contemplarlas contigo.

Sé que no soy perfecta, 
pero sé que puedo hacerte feliz. 
 

lunes, 5 de noviembre de 2012

#Jomeini

imagen extraída de http://blogdrajomeini.blogspot.com.es/







Deseando estoy poder tenerlo entre las manos y hoy sale a la venta. No sé si podré esperar hasta Navidad para convencer a alguien de que me lo regale o me lo traeré a casa en cuanto lo vea por primera vez en la estantería de alguna librería. 

Me enganchó la historia desde la primera entrada, me enganchó la Dra Jomeini, y me enganchó Ana desde que descubrí su blog. Envidia sana siento por mis compañeros del HUC que se han cruzado con ella, porque debe ser un gustazo contar con alguien así en esa gran familia.

Y me identifico con la Jomeini del libro, por su historia, por mi historia, porque como dice una amiga, del algún lado tienen que haber sacado las ideas los guionistas de Anatomía de Grey. Quizás son historias de gente normal, da igual enfermeros, fontaneros, profesores... Pero son nuestras historias, las que pasan mientras suena el pitido de una bomba de infusión de fondo, mientras intentas despegar el esparadrapo de los guantes o mientras esperas a esa amarilla que suena a lo lejos...

miércoles, 31 de octubre de 2012

Ese miércoles que quiere volver

Después de la tormenta llega la calma, o quizás sólo es que estoy en el centro del huracán, con esa calma aparente. 

Hoy me apetece darle otro sentido a una entrada que escribí hace un par de semanas. 

No hay manera de que vuelva ese miércoles,
tengo la sal entre los ojos mojados
Quiero que sepas que eres el culpable
de que hoy me sienta extrañamente bien
de que hoy me sienta extraña...
  
No llego a arrepentirme de la oportunidad que perdí anoche. Sé que hoy podría haberme despertado a tu lado, ver amanecer mientras nos acercamos a las estrellas, pero sé que hice lo mejor. No había excusa para aceptar tu invitación, aunque fueron muchas horas dándole vueltas a la cabeza sin saber que hacer. Y hoy ese miércoles ha querido volver, de una manera distinta, no sé si mejor o peor, pero igual de esperada. Abro los ojos para verte y retengo esa imagen que el espejo me devuelve. Tus manos buscándome, tu respiración en mis oídos, tus labios en mi nuca. Vuelvo a cerrarlos y sólo me preocupo por sentir, sin pensar...

Tengo la sal entre los ojos mojados, sal de la brisa marina que nos acompañó en ese paseo y ojos mojados, pero esta vez de lluvia y no de lágrimas. Y sólo tu eres el culpable de que hoy me sienta extrañamente bien. 

¿Quizás tenga esto algo que ver con que anoche 11 me escoltara cuando regresaba a casa? Podéis llamarme friki, orgullosa estoy de ello...



















Y para finalizar el día charlita y risas con esa otra estrella, lo que me confirma que no hay mal que por bien no venga. Hoy me alegro de que no me dieran esta guardia. Hacemos planes para la próxima y planteamos vernos fuera... Me apetece.

lunes, 29 de octubre de 2012

Y puede ir a peor

Al final mira como acaba el día. Con una rabia y un cabreo monumental. Y eso que la tarde empezó dándome una sorpresa, poder volver a trabajar aquí, en nuestro lugar. Pero no, falsa alarma y yo de nuevo a unos kilómetros. Vale, me convenzo de que no pasa nada y que será una tarde igual que otras.

Pero no, me adelantas y lo veo venir de frente, freno, grito y me quedo temblando por lo que pudo haber pasado, a ti, a nuestra amarilla. Mala señal. 

Y exactamente, a partir de ahí todo a peor. Esa carta que firmas, que es un paso para ti, pero que te alejará de mi. ¿Cuándo? ¿Cuánto tiempo me queda? Me agobio, sé que cada vez tengo menos tiempo, que nuestras tardes se acabarán antes de que pueda darme cuenta. No quiero. Esto no va a ser lo mismo sin ti. Yo no voy a ser la misma.

Tengo que empezar a reaccionar. Te espero a la salida y mientras llegas recibo otra noticia. Esa guardia que llevo semanas esperando no es para mi, con lo que los planes de cena y de disfrutar el saliente contigo se van por el desagüe. Y lo peor es quién va a hacerla... Ella, no podía ser otra, no hay más gente, no. Y lo sabía, sabía que yo quería esa guardia. Ya veo que puedo ir despidiéndome de todos los contratos de esta zona porque me lo va a poner difícil. Con esta rabia sólo deseo que esa mañana de saliente nuestra amarilla esté bien lejos. 

Se hace la hora y llegas, pero la rabia me consume las fuerzas y no soy capaz de cruzar contigo más que tonterías. La compañía tampoco lo permite y casi que lo agradezco, porque sé que si estamos solos voy a reventar y tendría mucho que explicar. 

Como era poco llego a casa, repaso mail, redes... y ahí estás, ahí está. Ya sé que muchas veces sufrimos más por lo que creemos que pasa que por lo que en realidad sucede, pero tanta casualidad me toca un poco la moral. Y para rematar, me ignoras. ¿Qué pasa? ¿Hoy es uno de esos días que te importo una mierda? 

Mañana será otro día, pero sé que puede ir a peor. Quiero estar aquí ese dia, aunque signifique no tener trabajo. Quiero jugar mis cartas. Quiero que hablemos, que aclaremos o que termine más liada de lo que ya estoy. Pero es que no me queda tiempo...

miércoles, 24 de octubre de 2012

Dejándolas pasar

Parezco idiota dejando pasar todas las oportunidades que se me van presentando. 

No tuve suficiente valor, caradura o como quieras llamarlo para conseguir ese número de teléfono el viernes. Y la cara que se me queda al darme cuenta ayer de que este viernes estaremos los mismos, como si el destino me diera una segunda oportunidad de hacerlo.
Y lo necesito, quizás con eso tenga motivos para olvidar esto que empieza a hacerme daño. Alguien que me aleje un poco de tí, porque yo sola no puedo. 

Y no puedo porque no te entiendo, no sé si tu mismo te entiendes. No entiendo lo que pasa por tu mente, por tus ventrículos. Hay días que siento que me necesitas casi tanto como yo a ti. Esos abrazos que me robas en el ascensor, esa insistencia en que pase tanto tiempo contigo, no dejarme ir... ¿Y luego qué? Días enteros que parece que ni siquiera sabes que existo. Hay quien dice que tienes miedo. ¿Miedo? No sé si tener miedo yo de que tú lo tengas.

Ahora tres días por delante con sus correspondientes oportunidades. Quiero aprovecharlas todas, vernos más allá de esa esquina, quitarte el peso que tantos días de esfuerzo ha puesto en tu espalda, abrazarte y cerrar los ojos. Y para empezar tengo que buscar la forma de tener unos minutos contigo esta tarde.

jueves, 18 de octubre de 2012

En la habitación



No hay manera de que vuelva ese miércoles,
tengo la sal entre los ojos mojados
Quiero que sepas que eres el culpable
de que hoy me sienta extrañamente bien
de que hoy me sienta extraña...

Felicidades

Un añito hace hoy de un día que quedó marcado en el calendario, tanto para mi como para ti. El aniversario de esos cambios profesionales para ambos. 

Tu cambiaste tu asiento y ahora eres el que guía mi cometa en su órbita, uno de los mejores que conozco.
Y yo empecé ese contrato que considero el mejor de los cinco años que llevo en este mundo. Me enseñó a valorarme como profesional, me explicó el significado de la palabra compañerismo, me permitió estar cerca de ti para seguir conociéndote y trabajar más de una vez codo con codo y del que me llevo grandes amigos y mejores recuerdos.

Y como todo aniversario pediré deseos al soplar las velas. Para ti pido que sea el primero de muchos, que consigas todo lo que te propones, aunque eso suponga que cambies de cometa, tenerte más lejos y visto lo visto, que esto quede en nada. Suerte con ese otro proyecto. Y para mi pido volver, aunque es prácticamente imposible, seguir encontrando grandes compañeros allá donde me lleven los contratos y que sea donde sea volvamos a trabajar juntos.

Esos son mis deseos profesionales, los personales se los pediré a la estrella que se cruce en mi camino hoy...

viernes, 12 de octubre de 2012

Yo también lo necesitaba

Es cierto, ¿cuántas veces nos olvidamos de nuestras propias necesidades por pretender cubrir las de otras personas? ¿Las de ésa persona?

Creo que debo darte las gracias, por pedirme ayer ese abrazo, por dármelo, porque no sé si te lo di yo o me lo diste tu. Que pena ser yo la que estaba de espaldas al espejo y no poder quedarme con esa imagen, pero me quedo con tu olor, la caricia de tu cuello en mi cara y tu respiración tranquila entre mis brazos.

lunes, 8 de octubre de 2012

Un lunes nunca puede ser perfecto

... aunque lo parezca.

Me desperté con su sonido, sabiendo que eras tú el que me daba los buenos días de esa forma. Lo interpreté como una señal de que el día iba a ir bien, como tantas veces me pasa. 

Efectivamente, el día empezó bien, llamada de trabajo a media mañana que me da un pequeño respiro durante una semana y me permite estar cerca. Luego ese encuentro, tu agobio y mis ganas de abrazarte y calmarte, pero hay lugares que no son los adecuados. Aún así algo debimos dejar entrever, porque algunos notaron eso que no sé si existe entre tu y yo. Confiarme tus cosas, pedirme ayuda es otra cosa que me hace sentir que me necesitas y sabes que intento ayudarte más allá de donde llega mi mano.

Pero los lunes parece que no pueden ser perfectos, por algo no le gustan a nadie. Busco un hueco, los últimos veinte minutos, para buscarte y hacer lo que antes no pude y me quedo de piedra al llegar y verla allí. Me rondó por la mente esa posibilidad cuando vi que estaba cerca, pero no le dí más vueltas, ya me prometí no preocuparme por cosas que no sé si pasan. Y exacto, allí estaba. Me trago la rabia, intento que no se note lo que en ese momento me atraviesa desde la espalda al pecho y disimulo. No soy capaz de mirarla a la cara, creo que se me va a notar en la mirada que la echaría a patadas de nuestro lugar. 

Una sonrisa, una broma. Me haces ganar un punto frente a ella y luego le das otro a ella frente a mi. Quizás piensas que es un empate, pero yo siento que la batalla de hoy tengo que darla por perdida. Al fin y al cabo será ella la que hoy te acompañe más allá de donde descansa nuestra amarilla y quién sabe si será ella la que te de ese abrazo de calma y algo más...


Debería modificar ese último párrafo, pero no lo voy a hacer, para que al releerlo cuando pase el tiempo recordar cómo me haces cambiar de ánimo en apenas nada. En el tiempo que ha pasado desde que lo escribí y ahora que estoy a punto de publicarlo me buscas, aunque sólo sea ese mensaje dejando caer que necesitas hablarme. Se me hacen eternos los minutos hasta que decido llamarte y darte con la voz ese abrazo que sé que me pides sin hablar. ¿O querías que supiera que ella no está?

domingo, 30 de septiembre de 2012

Remolinos

Me siento en medio de un remolino, de un torbellino que me impide centrar la cabeza y pensar en una sóla cosa a la vez.

Una nueva oportunidad de trabajo, no es el trabajo de mis sueños, pero me facilitaría tanto las cosas. Algo seguro para mucho tiempo, dándome la posibilidad de levantar ese vuelo que necesito ya. Pero renunciaría a esta vida de nómada temporal que a la vez que quebraderos de cabeza me ha permitido conocer tantos lugares, tantos modos, tantas gentes, tantas amarillas.


Tú, que hasta hace unas horas no sabía si te echaba de menos o no. Los primeros días se me hicieron cuesta arriba, pero a medida que ha pasado el tiempo me he acostumbrado a tu ausencia. Y ahora, cuando ya no queda nada para volver a cruzarnos me dices que tienes ganas de verme. No quiero hacer caso, pero no puedo evitar sentir una sonrisa apareciendo en mi cara. La invitación está hecha... Quizás octubre traiga lo que septiembre no nos dejó.

Y ese otro, que esta semana ha estado tan presente, que me ha hecho visitar otro rincón donde descansa una de mis estrellas. Esa compañía durante horas de una guardia aburrida y ese café por la mañana. Desde hace unos meses ha cambiado su actitud hacia mí, me gusta su forma de recibirme y me ha confesado que aquel día lo hizo por mi. Pero, ¿por qué también es tan complicado?

lunes, 24 de septiembre de 2012

Vuelta a la realidad

Vuelvo hoy a ser una persona a un teléfono pegada, con la incertidumbre de no saber donde estaré mañana, sin poder hacer planes más allá de unas horas. Después de tanto tiempo me costará acostumbrarme, seguro.

Primer día superado casi con sobresaliente, sabía que iba a ir bien desde que al amanecer me encontré con ella. Un baile durante unos kilómetros que me dió un empujón para afrontar lo que venía. Y así fue, buen día en el trabajo, con la esperanza de que mañana también lo sea y 10 me recompense. Y esas cosas tuyas, como si fuera tu ángel de la guarda... Ay pizzigato! Buen viaje!

 

domingo, 16 de septiembre de 2012

No se alinearon los planetas

No pudo ser, tendré que seguir esperando. 

Ayer era uno de los días en los que los astros podían alinearse, pero todo salió al revés. Yo y mi circunstancia, tu y las extras. Apenas cinco segundos nos cruzamos en aquella rotonda, pero sólo pude intuirte. Y caí en la cuenta que ayer hacía un mes...

jueves, 6 de septiembre de 2012

Buenos días, por última vez

07:58 - Buenos días por última vez neno. Ya no me volveré a cruzar contigo hasta no sé cuando y se me derrama una lágrima. A ella la seguiré viendo unos días más, pero no me dirá nada especial. Casi un mes sintiendo que 20 no está completa.

Quiero estar rendida y muriéndome por el mismo motivo que tu lo estás hoy... Pero no, me muero por no haber sido yo y porque hoy nos despediremos y pasará Septiembre sin traer lo que un día prometió.  Me das las gracias y me sacas una sonrisa cuando me llamas amor, aunque sé que hoy es sólo una palabra, sin contenido. 

Pero voy cambiando, me abrazo al fallo y me pongo pequeñas metas para hacerlo más llevadero. ¿9, 16, 25 días? No lo sé, pero sólo pido que pasen rápido y que recuerdes que estoy aquí.

 

martes, 4 de septiembre de 2012

Anhedonia

No tengo fuerzas para escribir lo que pensaba, estoy en proceso de digerir lo que ha pasado estos dias. Esos besos que no son tuyos, y esos besos tuyos que no son míos. Y ha llegado septiembre... no sé si para algo o sólo para recordarme que no soy capaz de conseguirlo.

Asi que hoy me limito a dejar aquí algo que he leído y me apetece compartir:

DEBO CONFESAR QUE: Que yo también tengo un amor inolvidable y un secreto inconfesable... Que en mi mente planeo conversaciones que nunca se van a llevar a cabo... Que odio pelearme por una ESTUPIDEZ con alguien que realmente ME IMPORTA... Que detesto cuando me dicen "TE EXTRAÑO" y no hacen nada para verme... Que a mí también se me paró el corazón con el "¿te puedo hacer una pregunta?". Que yo también tuve un nudo en la garganta cuando me enteré de algo y tuve que fingir que todo estaba bien... Que yo también tuve un ataque de sinceridad y luego pensé: ¿¿para qué lo dije?? Que odio irme temprano de un lugar y que después me digan TE PERDISTE LO MEJOR!! Que me di cuenta que estoy esperando algo que nunca va a suceder... Que me encanta cuando una canción me hace RECORDAR como si estuviera viviendo ese momento inolvidable nuevamente. Que PREFIERO estar loca y SER FELIZ que ser normal y amargada. Que ME GUSTA oír las mentiras cuando SÉ TODA LA VERDAD... Que Con MÚSICA: HE BAILADO, HE LLORADO, HE REÍDO, HE RECORDADO,HE BESADO y HE AMADO... Pero ante todo... debo confesar que... LO PASADO... LO VOLVERÍA A HACER!
 

viernes, 31 de agosto de 2012

I just wanna...



Eso he hecho esta semana... Estoy agotada, pero viva!

lunes, 27 de agosto de 2012

Volviendo a la realidad

Se acabaron las (mini)vacaciones y toca volver a la realidad. Empiezo a aterrizar de nuevo en la rutina y no ha sido mala la bienvenida, después de tantos meses 20 ha vuelto a hacerme una visita... 

¿Ha cambiado algo? Ya sabes lo que hay, creo que no lo puedo decir más claro. Me gustaría saber si esta lejanía nos ha acercado un poco y si ha hecho que sigas pensando en septiembre. Aunque veo que en septiembre piensa alguien más... Si es que lo cuento y no es creíble.

He decidido hacer borrón y cuenta nueva, empezar a vivir según lo que me dicte el corazón y el cuerpo y no dejar pasar ninguna oportunidad. No sé por qué esa pregunta de si he hablado con ella, pero en lugar de comerme la cabeza y alejarme he optado por ponerme un poco más a tiro. Quizás haya metido la pata, pero por mi que no quede... 



lunes, 20 de agosto de 2012

Y para despedir...

Dos entradas el mismo día, si, pero no podía irme sin dejar constancia de la despedida que he tenido hoy. Llámalo casualidad, destino, magia, tontería...

No era un buen día hoy, aún no lo es, pero todas os habéis cruzado en mi tarde. En apenas media hora todas me habéis sacado una sonrisa y sé que cuando vuelva nos volveremos a encontrar. 

10 haciendo la compra para la noche que está por venir, 11 en plena acción, 20 ya en reposo y 80 bajo una buena ducha. 

Son seis días que os voy a echar de menos, a unas más que a otras, a unos más que a otros. Y tú, tu tienes mis lágrimas en los bolsillos

Dudas infinitas



No dejes que todo esto quede en nada


 Dudas infinitas... ¿Lo estoy? ¿A qué juegas? ¿Y ella?

miércoles, 15 de agosto de 2012

Oasis en el desierto

13 de Agosto... Mal día, supersticiones a parte. Pero me conoces y sabes que no estaba bien, viste por primera vez mis lágrimas y me tendiste la mano. Mejor en otro momento, te agradezco la preocupación y es un punto a mi favor, incluso diría que ese mosqueo pseudoceloso me da otro punto, pero con ella allí mejor dejar la partida en tablas. 

14 de Agosto...  Un abrazo, no importa donde quede amarilla, pero me lo das. Sabes que lo necesitaba. Hoy el día parece que va mejor, además esa casualidad de encontrarme con Ele, un par de besos después de tanto tiempo. Definitivamente, podría ser. Una mañana como hace tiempo que no la tenía, una mañana de las que imagino. Sólo faltó quedarme a comer, pero no se puede tener todo

15 de Augusto... Lluvia en medio del verano, un oasis a mitad del desierto. No había mejor momento para esto que en medio de esta semana. Gracias por convertirme en gigante de este modo, cuando más lo necesitaba. Sabes que queda pendiente otra ronda, eso si... primero la obligación y el deber es amarillo.




Huele como si estuvieras a mi lado, seré yo?



sábado, 11 de agosto de 2012

Jueves

Jueves de manos inquietas y exploradoras. Jueves que dejan sabor a miel en los labios para hacer más llevadero el fin de semana... ¿Y el próximo? Pocas esperanzas de que esta racha continúe. 
Por delante la semana que más he temido, ella un poco más cerca y yo de manos atadas. Pero tengo fuerzas, porque esa advertencia significa que has pensado en ello y es más de lo que yo esperaba. Y sé que si pasa me complicaré la vida, pero merezco intentarlo.

No me hagas cambiar de opinión el lunes, por favor...

domingo, 22 de julio de 2012

Gris

Primera semana, tres días en realidad, de este segundo acto y la verdad es que no puedo quejarme.  

Has vuelto igual que como marchaste, como si nada hubiese pasado y me planteo si quizás yo le di demasiadas vueltas a la cabeza, si monté paranoias 3.0 en mi cabeza, si creí ver más de lo que pasa. Asi que me he prometido a mi misma no dar importancia a cosas que no la tienen, intentar disfrutar esos momentos y aprovechar las oportunidades que se me presenten. Sé que nunca va a poder ser, asi que no puedo pretender más de lo que hay. 

No ha sido todo tan negro como lo imaginé, ni tan blanco como me hubiese gustado, pero la patada en el estómago esta vez no me la llevé yo (2-1)

 


Esperaremos a septiembre... Pizzigato

sábado, 14 de julio de 2012

Preparando el terreno

Lo sabía! ¿Ves como te conozco? Ahora que estás a punto de regresar vas preparando el terreno para que vuelva a ser como antes.

Después de semanas sin saber de ti, esa llamada... Explicaciones y excusas y aún así no soy capaz de darte un no rotundo cuando me preguntas si te he extrañado. No te creo la mitad de lo que cuentas y sigo sintiéndome utilizada, pero no pude evitar sonreir y sentir esas mariposas al escucharte. Estoy enfadada conmigo misma.

Vamos a ver como regresas, estaré expectante. Ahora ya no estamos solos y sé que para mi no va a ser fácil. Pero no voy a demostrarte mi debilidad y menos con ella delante...

Y si, no niego que te he extrañado. Hacía tiempo que 20 no venía hacia mi, pero la espera se hace rara sabiendo que viene sin ti.



 

Nada más que decir...
 

lunes, 9 de julio de 2012

Ya no puedo hacer más

Me arriesgué a conocerte, a pesar de que no empezamos con buen pie. Pero te abriste a mí y dejaste que conociera lo que hay detrás de ese muro. Y cambié mi opinión sobre ti, me di cuenta de que detrás de tu fachada hay una vida entera que no ha sido fácil, y por desgracia tampoco lo será en el futuro. 

Y he intentado que estés bien, ayudarte en todo lo posible, en lo que ha estado en mi mano y en lo que ha estado más allá de ella y sabes que lo he hecho porque en estos meses te has convertido en alguien importante para mi.

Te agradezco que hayas contribuido con tus ánimos a mi decisión de cambiar, a que mi autoestima haya subido un peldaño, que en esas ocasiones hayas contado conmigo.

Pero ahora, ¿qué pasa? ¿Por qué esta lejanía? Sé que estas semanas no están siendo fáciles para ti y sabes que intento ayudarte, pero me pagas así. ¿Ya no me necesitas? ¿Tengo que pensar que me has utilizado? Y pretenderás que cuando vuelvas todo siga igual...

Lo siento, pero yo ya no puedo hacer más.

Infinita ingenuidad,
ilusión centesimal,
me creía tan capaz
con mi cápsula de Albal.
Mi torpeza fue total,
de tan grande es demencial,
no detecto una señal,
nunca encontraré el lugar
donde al fin me entienda. 



Y yo ya no puedo hacer más si este más siempre resta.
Y yo ya no puedo hacer más si este más siempre resta.
Y yo ya no puedo hacer más si este más siempre resta.

miércoles, 4 de julio de 2012

Ley de la rabia


∑ Rcn = E Er + Rx  = F

Según las leyes de la física, la energía ni se crea ni se destruye sólo se transforma.
 
Rabia contenida, rabia de días, de semanas. Rabia que se suma y genera en mí una energía. Positiva o negativa, según la ocasión. 
Pero he aprendido a transformarla en energía útil, o por lo menos lo intento. Debo aprovechar esa energía para obtener fuerza, sacar de donde no tengo para seguir adelante y cumplir mis objetivos. No quiero gastar ni una milésima de esa energía en llorar, porque no tiene sentido, no te lo mereces. Parece que ahora no me necesitas. Retumban en mi cabeza las palabras que me decías sobre ella hace unos meses. ¿A quíen se le va la pinza ahora? 13 días para comprobarlo... 

Pero seguiré adelante, con mi Objetivo Principal en la mente y el resto un poco más cerca. Y entonces estaré a la altura




 

lunes, 2 de julio de 2012

Un empujón


Esperaba que hoy fuera peor día, pero he podido llevarlo bien.

He mantenido la compostura y la frente alta al verla llegar. Nos hemos saludado y todo sigue como hace un año, sólo que ahora, sin que ella lo sepa, sé sus motivos. 

Se reparten los destinos y a la vez que provoca desilusión en ella, provoca alivio en mí. No estará, por lo menos no tanto tiempo... Una buena noticia dentro de este caos que me espera.


Y he pensado que no debo compararme, que no soy inferior a nadie. Tu mismo me lo dices. Y empiezo a creérmelo. Eso me anima y me motiva a seguir intentándolo, a seguir consiguiendo ser quien yo quiero. Me costará, pero es un largo camino del que ya he recorrido una parte y no voy a pararme. Ni pararé de luchar por eso que me hace sonreír.


En resumen, buena mañana. Queda aún la tarde, y en un rato me daré cuenta de que no es una de nuestras tardes y te echaré de menos... 


Parece que las amarillas se esconden cuando no estás (-15)

domingo, 1 de julio de 2012

30 minutos tarde


Compartimos espacio, pero no tiempo. Otra oportunidad perdida, pero aún sigo sin entender. ¿Por qué? ¿Primero esa forma de decir que estás ahí y luego marcharte sin una explicación, sin contestar?  
Y tendré que guardarme esto sin que lo puedas explicar, no tendrá sentido removerlo cuando vuelvas. Podría aprovechar estas semanas para olvidar, para volver a enfriar la cabeza y asumir que lo que pudo ser ya no será. Pero presiento que va a ser muy difícil, imposible no recordarte cuando escucho ese sonido que me hace sentir un escalofrío, imposible no recordarte cruzándome cada día con tu amarilla, imposible no recordarte cuando a partir de mañana ella nos acompañe y me recuerde que está aquí por ti.

Hubiera sido un buen rato 




viernes, 29 de junio de 2012

Reloj de arena



Aún sonriendo por el día de ayer, siento que se me va a hacer muy largo este tiempo que tendré que esperar. Sin embargo, pienso en lo que se avecina y me alivia saber que no estarás, que tendré tiempo de asimilar que tenemos compañía antes de que regreses y se me venga el mundo arriba. Se me hace un nudo en la garganta y se me nubla la vista

Vuelvo a sonreir pensando que quizás mañana, y se me encoge el estómago por si se vuelve a romper la ilusión una vez más. ¿La definitiva? Y vuelve el nudo en la garganta...

¿Cómo se puede querer adelantar el tiempo y retrasarlo a la vez? Si mi reloj fuera de arena no sé cuántas veces le hubiese dado la vuelta hoy


Lo único que tengo claro hoy es que te voy a echar de menos


miércoles, 27 de junio de 2012

Una niña imantada...

Ya hace algunos siglos que he empezado a sospechar
que he caído sin quererlo en tu gravedad.
Es como si andara siempre en espiral,
cuando encuentro una salida tú apareces, niña imantada...



Me has imantado... 

lunes, 25 de junio de 2012

¿Por qué un blog?

Esa es la pregunta, ¿Por qué hago esto? Quizás por aburrimiento, por liberación, por necesidad... 

Creo que sí, necesidad de poner en orden mis ideas, mis sentimientos. También por ganas de algo nuevo, de empezar a dar pasos para cambiar de vida, para vivir la vida que quiero y que no sé como empezar.Me planteo si no he perdido casi 25 años de vida, intento tomarlo como un aprendizaje y un impulso que me ayude a conseguirlo.

Poco a poco, entrada a entrada iré dejando aquí mis ideas, mis tonterías y un batiburrillo de cosas que muchas veces no puedo expresar de otro modo que escribiendolo, no para que alguien lo lea, simplemente para sacarlas fuera...